jueves, 19 de abril de 2007

La ecología, en sus albores

Buenos días. Finalmente he podido incorporame a este foro.

Agradezco a María Teresa Giménez Barbat y demás directivos de la Asociación Ciutadans la amable invitación a participar en este interesante y complejo debate.

Para empezar, espero que me permitan una cita que resume, a mi modo de ver, la situación del conocimiento que tenemos sobre la situación climatológica de nuestro planeta:

“La biosfera es lo más complicado a lo que tenemos que enfrentarnos nosotros los humanos. La ciencia de la ecología planetaria es aún joven y está subdesarrollada. No debe extrañarnos, pues, que expertos honrados y bien formados e informados puedan estar en profundo desacuerdo sobre los hechos”

Freeman J. Dyson: What a World! New York Review of Books, vol. 50, núm. 8, 15 de mayo de 2003.

Asimismo, creo que nos encontramos ante una situación en la que hay que distinguir lo más claramente posible entre la ignorancia ecuménica y deshinibida del lego y la ignorancia informada y responsable del experto. Estamos, en muchos casos del asunto sobre el que debatimos, en una situación en la que los métodos científicos y el conocimiento que nos están proporcionando sirven más para saber lo que no es problable que sea cierto que para saber, basándonos en datos precisos y fiables, aquello que es ya un conocimiento científico establecido, entendido éste como una creencia que es verdadera porque se corresponde con la realidad más allá de toda duda razonable. Asi pues, el experto bien informado sabe los límites de su ignorancia, mientras que el lego confunde lo que sabe con lo que ignora. Lo cual, muchas veces no impide que se oiga más y más fuerte a los legos con agenda política y motivaciones subjetivas que a los expertos con conocimientos objetivos.

Tras este arranque más o menos teórico, hago una declaración de intenciones: mi interés es debatir aquí sobre asuntos concretos más que sobre generalidades. Lo que significa que doy por bueno el diagnóstico de que nos encontramos ente un aumento importante y rápido de las temperaturas de la biosfera cuya repercusión en la vida que alberga dicha biosfera, aunque aún sin poderse concretar en modelos cuantitativos, es muy probable que sea muy importante y desfavorable para muchoas habitantes de la Tierra.

Para empezar, pues, quiero proponerles a ustedes que analicemos lo que se sabe y lo que no de los llamados "biocombustibles" -- o energías procedentes de la "biomasa" --, al parecer una de las posibles soluciones a la emisión de gases de efecto invernadero propias de los combustibles fósiles que más inversiones y más actividad pública y privada está generando.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Querría preguntarles a ustedes qué opinan de nuevos combustibles como el Etanol. Parece que algunos gobiernos sudamericanos tienen esperanzas en lograr ser autónomos energéticamente con ese cultivo que le sirve de base.